La fortaleza del héreo cotidiano consiste en dejar de considerarse oveja, lleno de miedos y de inseguridades, a estar seguro de que su esencia es la de un tigre o una tigresa, uno de los animales más bellos y fuertes de la naturaleza según el cuento sufí, la corriente mística del islam. Recordemos los pasos vividos: atendiste la llamada de la aventura, viviste la negación, descubriste tu sombra y aceptaste cruzar el umbral. Atravesaste un desierto, te abriste al mundo, conectaste con tu esencia, recibiste el apoyo de amigos y personas de referencia y volviste a soñar. Pero el proceso de aprendizaje o de iniciación se ha de materializar en hábitos y en comportamientos. Tomar conciencia es un paso esencial, pero el protagonista del cuento no se convertirá en el tigre que lleva dentro si, además de tomar conciencia, no cambia sus hábitos y adquiere unos nuevos más acordes a su naturaleza. Todo ello va a requerir tiempo y disciplina personal, pero no olvidemos algo: " La disciplina es la que nos de la gran libertad", como dice el maestro hindú Sri Shyamji Bhatnagar. Y éste es el siguiente paso a la iniciación.

Crecimiento Interior